¿Has oído hablar alguna vez de la grafología? Podrías sorprenderte al descubrir que la manera en que alguien escribe podría desvelar más acerca de sus verdaderas intenciones y lealtad.
La grafología es esos estudios de la letra escrita que muchos dicen que puede darnos un vistazo al alma de una persona. Algunos creen que a través de ella, podemos conseguir pistas sobre las verdaderas intenciones de quien nos rodea, como la lealtad condicionada a factores externos. Suena interesante, ¿no? Es que justamente hay quien dice que no toda lealtad es genuina y que puede estar amarrada a intereses más superficiales.
Es vital saber distinguir entre el interés sano y el egoísta. Está claro que todos queremos rodearnos de gente que nos interesa por buenas razones, pero está eso de no cruzar ciertas líneas que la grafología nos puede ayudar a ver en las dinámicas de cada día.
¿Qué dice la grafología sobre la gente oportunista?
La idea de que tu letra pueda revelar si sos una persona oportunista suena a ciencia ficción, pero hay estudios de grafología que sugieren que ciertos trazos en tu escritura podrían indicar estas tendencias. Al parecer, si sos de los que mueve cielo y tierra por tu propio beneficio, tu letra podría traicionarte mostrando que sos de los que hacen relaciones por conveniencia o que sos del tipo manipulador que se hace la víctima cuando te conviene.
Aunque para sacar conclusiones serias necesitarías un análisis en profundidad con un profesional, hay que decir que hay cosas, como la forma en que se escribe la letra "Y", que creen que dan pistas sobre cómo podrías ser en temas de relación(n) egoísta.
¿Qué nos dice la letra "Y" según la grafología?
Los grafólogos dicen que si la "Y" la escribís con un palito de abajo más corto de lo común, podrías estar más enfocado en vos mismo que en los demás. Si además la parte de arriba parece una "V" bastante puntiaguda, estaríamos ante supuestas tendencias a usar los vínculos en beneficio propio.
Y si esta misma letra “Y” está inclinadita hacia la derecha, aunque eso podría ser señal de que sos alguien con la mira en el futuro, mezclado con lo anterior podría indicar que vos ponés tus intereses primero que todo lo demás.
Eso sí, es básico recordar que la grafología, por más que aporte perspectivas, nunca puede considerarse una verdad absoluta. Debe tomarse como algo adicional a lo que ya sabemos o sentimos en nuestras relaciones, como una pizca de ciencia que puede darnos un panorama más claro.
Alan Steve, quien tiene un bagaje en Bioquímica Clínica, nos invita a profundizar en la temática a través de la comunidad "Enséñame de Ciencia".
La lealtad y la motivación personal son cosas que siempre han dado de qué hablar. Este texto nos propone unas herramientas grafólogas para atisbar si hay un poquito de egoísmo en cómo gestionamos nuestras relaciones a partir de algo tan cotidiano como escribir. Es muy llamativo pensar que nuestro garabato pueda decir tanto sobre nosotros, aunque hay que tomar con pinzas esto de la grafología, que no deja de generar debate sobre cómo de científica es.
Usar la grafología para entender más a fondo los intereses egoístas en relaciones del día a día puede resultar un nuevo modo de ver las cosas, que suma a esa constante búsqueda de una conexión humana honesta y profunda. Pero recordemos, la grafología, como cualquier otro tipo de interpretación de comportamientos, se tiene que manejar con cautela y no olvidar nunca lo complicada que puede ser la personalidad humana.
Y tú, querido lector, ¿qué piensas de la grafología como herramienta para descubrir más sobre las intenciones de la gente? ¿Crees que hay algo de realidad y utilidad en relacionar nuestra escritura con lo que somos o queremos?
"Chi non conosce la verità è uno sciocco, ma chi, conoscendola, la chiama bugia, è un delinquente" - così parlava Bertolt Brecht, e la sua riflessione sembra calzare a pennello con il tema della lealtà e dell'interesse personale. La grafología, quella scienza che studia la scrittura per svelare i tratti della personalità, ci offre uno strumento per smascherare coloro che mascherano la loro vera natura dietro un velo di finta solidarietà. È paradossale pensare che, in un'epoca dove la comunicazione è così fluida e veloce, sia necessario affidarsi alle antiche lettere per comprendere le vere intenzioni di chi ci circonda. Ma forse, in un mondo in cui le parole sono così facilmente manipolabili, il modo in cui le scriviamo può rivelare più di quanto pensiamo. La grafología ci insegna che la disonestà può nascondersi nelle piccole cose, come nella forma di una "Y". E mentre la scienza ci fornisce gli strumenti per decifrare questi segnali, sta a noi essere abbastanza saggi da riconoscere chi è leale al nostro essere e non solo al nostro avere.