Los pasillos de palacio jamás habían sentido la tensión que trajo consigo el regreso de Catalina. Descubre qué sucesos inesperados trae el último capítulo de 'La promaza'.
En 'La promesa', una telenovela que va entretejiendo caminos de aristócratas y sirvientes, Catalina hace una aparición que deja a todos boquiabiertos. El palacio se encuentra zumbando de chismes y miradas que no presagian nada bueno.
El rol de Alonso se hace super crítico acá, tratando de mantener todo bajo control. Es un lío grande, porque además lo de Ayala que se está poniendo peor y todos están preocupados.
La salud de Ayala y las preocupaciones de palacio
Ayala anda de capa caída y parece que ni los doctores saben qué hacer. Y con esto, cada uno en el palacio anda con los nervios de punta.
Todo esto causa que el conde tome una decisión muy difícil acerca de Martina, se encuentra una cicuta en su espacio y bueno, decide que lo mejor es que se aleje para proteger al resto y a esperar que allá lejos enmiende sus errores.
Santos y Vera: Un juego peligroso en un palacio tenso
El tema con Santos y Vera no tiene buena pinta. Él tratando de estar a cada rato con ella y ella no quiere saber nada. Candela, por otra parte, ya está haciendo maletas para resolver un lio legal con el hijo de Virtudes, y promete volver con buenas noticias.
La onda de Petra, la nueva ama de llaves, no está ayudando, le hace la vida imposible a las doncellas y especialmente a Jana. Las cosas se revolucionan más cuando Petra encuentra a Jana en una situación bastante mala.
Todo está que arde en 'La promesa'. Con tantos líos y preguntas en el aire, uno no puede más que esperar a ver qué nos traerá el próximo episodio con ansias.
La serie 'La promesa' se mete de lleno en líos de familia y de la sociedad, y nos enseña cómo lo que uno decide puede cambiar las cosas un montón. El conde, por ejemplo, hace algo super fuerte para proteger a su familia y eso toca el tema de vivir con las consecuencias de lo que uno hace.
La serie te hace pensarlo bien eso de que hay que hablar y entenderse para solucionar problemas, y cómo eso de tener poder cambia las relaciones entre personas. Muestra como los que tienen menos poder la pasan mal cuando los de arriba hacen lo que les da la gana.
Es chido ver en la tele cómo uno puede manejar las broncas y encontrar maneras más justas de arreglar las cosas. 'La promesa' tiene un montón de cosas interesantes que decirnos sobre la vida.
"La verdad se corrompe tanto con la mentira como con el silencio", decía Cicerón, y es que el silencio y los susurros que corren por los pasillos del palacio en 'La promesa' son tan peligrosos como las mentiras que se tejen en la sombra. La llegada de Catalina no solo ha agitado el avispero de las intrigas palaciegas, sino que ha evidenciado la fragilidad de una paz construida sobre la base de no afrontar los problemas. La salud de Ayala, que se desvanece como un espejismo en el desierto, es el reflejo de la salud de una casa donde las apariencias son más importantes que la verdad.
La decisión del conde sobre Martina, por más drástica que parezca, no es más que un parche a un problema mayor: la incapacidad de enfrentar y resolver los conflictos internos que corroen los cimientos de la familia. La obsesión de Santos por Vera, por otro lado, es un claro ejemplo de cómo la falta de límites y la obsesión pueden tornarse tóxicos, afectando no solo a los involucrados sino al ambiente que los rodea.
Candela, en su cruzada por resolver la disputa de Virtudes, demuestra que la determinación y la acción son las verdaderas soluciones a los problemas, no el silencio cómplice. Y Petra, con su actitud despótica, representa ese poder que, cuando no se ejerce con justicia, se convierte en un arma de humillación y abuso.
En este entramado de poder, silencio y mentira, la verdad se convierte en la moneda más valiosa y escasa. Y aunque muchos prefieren el murmullo del chisme al grito de la verdad, es esta última la que al final, como un rayo de luz en la oscuridad, tiene el poder de liberar o condenar. La pregunta es: ¿quién tendrá la valentía de enfrentarla?